La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de El Vendrell ha iniciado los primeros trabajos de arreglo del lavadero público que se encuentra en la calle Girona, junto al aparcamiento de la calle Colón.
A petición de la vendrellenca Gisela Alcón y de otras personas de la villa preocupadas por la recuperación de este elemento histórico, la Concejalía ha iniciado las tareas para proteger este elemento del patrimonio del municipio. En los últimos días se ha hecho ya el cierre de los lavaderos y también el desbrozado y la limpieza general del espacio.
Este lavadero público, que se empezó construir en 1856, es uno de los tres que tenía el Vendrell en el siglo XIX. Había otro en el barrio de Francia, hoy totalmente desaparecido, y otro cerca del cementerio, del que una parte se conserva todavía dentro de la Escuela Àngel Guimerà. Alcón explica que estos espacios se utilizaron aproximadamente hasta los años 60 y 70 del siglo pasado, cuando empezaron a introducirse las lavadoras en los hogares.
El lavadero de la c / Girona consta de una estructura de dos balsas adosadas de gran tamaño, con un cubierto en uno de los extremos, que se aguanta con pilares de ladrillos y vigas de madera con azulejos como techo.
La concejala de Cultura, Silvia Vaquero, explicó que el próximo objetivo del Ayuntamiento de El Vendrell es el de trabajar en la restauración y preservación del lavadero "por su importancia como vestigio de arqueología contemporánea".
Según Gisela Alcón, además de la necesidad de preservarlo como patrimonio público, su conservación puede ser también un instrumento muy útil para testimoniar cómo eran estos espacios de mujeres, el duro trabajo que llevaban a cabo y las relaciones sociales que hay establecían.